

Aspiración de contenidos líquidos

La aspiración de contenidos es la extracción de líquido de cualquier estructura para lograr un rápido alivio del dolor o una aceleración en el proceso de reparación de los tejidos.

¿Qué es la Aspiración de contenidos líquidos?
La aspiración de contenidos es la extracción de líquido de cualquier estructura para lograr un rápido alivio del dolor o una aceleración en el proceso de reparación de los tejidos. Esto porque la presión del líquido contra la cavidad produce muchas veces dolor y también en otras lesiones, el líquido no permite que contacten las superficies para su cicatrización.
También conocido como artrocentesis cuando es articular, este es un procedimiento médico donde se realiza una extracción de la colección líquida dentro de la articulación u otra estructura que es lo que principalmente produce el dolor en los cuadros de patología articular crónicos que están en fase dolorosa, en los quistes sinoviales (como el quiste de Baker) o en desgarros musculares, donde el hematoma impide que el músculo cicatrice y retarda su recuperación. Este procedimiento se realiza siempre con apoyo ecográfico por lo que es muy seguro y con feedback en tiempo real..
Se puede combinar con infiltración de la zona, para acelerar la rehabilitación. Este tipo de tratamiento está indicado en derrames articulares, extracción de quistes sinoviales, desgarros que generen sangrados, esguinces, bursitis y todo tipo de patología inflamatoria.
¿Cómo es el procedimiento?
Evaluación del paciente Es necesario realizar una evaluación antes de realizar el procedimiento. En Clínica CRL, la evaluación se realiza con un médico especialista junto al kinesiólogo.
Preparación del paciente El paciente se coloca en una posición que permita un acceso adecuado a la zona afectada. Se realiza la asepsia de la zona.
Inserción de agujas Se utilizan jeringas con agujas de distinto calibre según cantidad de líquido a extraer, estas se insertan percutáneamente en el tejido afectado, alcanzando la zona específica del líquido, siempre de manera ecoguiada.
Extracción de líquido Una vez que la jeringa está en su lugar, se extrae el líquido para generar el efecto deseado.
Posterior cuidado y recuperación Después del procedimiento y desinfección de la zona, se brindan instrucciones al paciente sobre cuidados posteriores, como por ejemplo el reposo deportivo por 48 horas y la suspensión de antiinflamatorios por 2 a 3 días.
¿Cuáles son los principales beneficios?
Estimulación de la Regeneración En el caso de, por ejemplo, un desgarro muscular, donde se rompen fibras y estas requieren estar en contacto para regenerarse y no generar un cicatriz no funcional, el sangrado o hematoma líquido que se genera puede impedir que esto ocurra, por lo que es muy importante extraerlo en los primeros 3 a 4 días de ocurrida la lesión.
Alivio del Dolor Toda inflamación produce dolor, ya sea por los químicos que se generan en la zona que sensibilizan la zona, así como también por la presión excesiva que genera una colección líquida sobre las paredes de la zona. La mayoría de las veces extraer la colección líquida disminuye inmediatamente el cuadro doloroso y permite iniciar el proceso de recuperación de manera precoz, ganando tiempo en el manejo total de la lesión
Funcionalidad de la zona La extracción del líquido permite la movilidad precoz y revertir el exceso de inflamación que genera una lesión. Esto faculta al paciente a iniciar mas tempranamente el proceso de recuperación con la consiguiente vuelta más temprana al deporte.
Estética de la inflamación Muchas veces un quiste puede producir una deformidad visible que altera la estética normal de la zona. Con este procedimiento, ese tipo de alteraciones desaparecen inmediatamente, como es el caso de quistes de Baker o quistes de muñeca.
¿Por qué elegir este procedimiento?
Este procedimiento destaca por su capacidad para acelerar los procesos de recuperación ampliamente, además de estimular la reparación de tejidos y disminuir el dolor. Elegirlo en la Clínica CRL significa optar por un enfoque avanzado y efectivo ya que siempre se acompañara de un equipo multidisciplinario y de una guía ecográfica para realizarlo.
Patologías
Derrames articulares de rodilla o cadera.
Lesiones de cartílago articular, menisco, ligamento cruzado.
Lesiones musculares: Desgarros de tamaño medio o grande.
Bursitis subacromial u otros tipos de bursitis.
Quistes sinoviales.
Quiste de Baker.